sábado, 30 de julio de 2011

LA GRAN HAMBRE / HISTORIA SAGRADA DEL PUEBLO QOM EN EL PAÍS CHAQUEÑO, TOMO 1 / FLAVIO DALOSTTO



La Gran Hambre

Entonces, siguió la Gran Oscuridad con llovizna por muchos días; y empezó a faltar la comida, porque no podían salir a conseguirla. Y era llovizna que venía desde el Sur. Y la Oscuridad era tan oscura, que nadie podía salir a mariscar. Y a toda aquella gente, se les empezaron a crecer los dientes, y eran como dientes de palometa, muy filosos.
Entonces, las familias que tenían varios hijos, empezaron a mirarlos como comida, y se les tiraron encima, y con sus dientes despedazaron a sus propios hijos, y se los comieron allí mismo, hasta no dejar ni un dedo. Y se comieron a todos los niños.
Y cuando terminaron de comerse a todos los hijos, empezaron a mirarse entre los hombres y las mujeres, con hambre y desesperación.
Entonces, cuando alguno se dormía, los demás se les tiraban encima; y con sus dientes de palometa, los mataban, los rompían y se los comían hasta el último pedacito.
Y había una anciana en el Cielo, y comenzó a machacar en su mortero, y dijo: -Es liviano el mortero, estoy jugando con mis nietos, pero ya viene el día de la fruta vegetal.
Y después de tanta oscuridad, llegó el día en que empezaron a verse los primeros rayos de la mujer-sol. Y la gente miró a su alrededor, y vieron que ya estaban madurando las frutas de los árboles.
Y se miraron entre sí, todos ellos, y vieron que estaban flaquísimos, y que se les marcaban todos los huesos, bajo la piel finita  y pálida. Y parecían Gente Esqueleto.
Y cada matrimonio que había sobrevivido, salió a buscar comida. Y vieron que ya estaba maduro el algarrobo, el chañar, el mistol, el molle y el vinal, pero les dio náuseas por la carne humana que se habían comido. Y se dieron cuenta que se habían comido a sus hijos, y lloraron, y sus bocas se cayeron, y ya no pudieron sonreír hasta que murieron.

No hay comentarios:

Publicar un comentario